Domingo, 19 de Mayo de 2024
La justicia estuvo del lado de la empresa perteneciente al grupo Clarín y ordenó el desalojo. Las familias no obtuvieron ni de la justicia, ni de la empresa, ni del ministerio de trabajo, ninguna respuesta que permita avizorar un acuerdo. Sólo estuvieron ellos, su lucha, la de sus familias y la de quienes en solidaridad, acompañaron el acampe con frío, con calor, con lluvia, esperando quizá que mediara un acuerdo, o que el gobierno nacional intercediera como hizo en otros conflictos laborales donde había interés de solucionar algo. Pero en este caso, claramente, se privilegió el interés de la empresa.
La planta que imprimía publicaciones del grupo Clarín se había ido vaciando. La empresa adujo tema de "costos" y "reubicación" pero lo cierto es que dejó en la calle a trabajadores de mucha antigüedad; tercerizó trabajos en otros talleres y hasta mandó a imprimir a Chile publicaciones que antes hacía en el país.
Hoy fue un día triste para quienes durante semanas resistieron los despidos y resistieron el desalojo. Con el marco de un fuerte operativo policial que cortó incluso calles varias cuadras a la redonda y formó sus efectivos prestos para "enfrentar" lo que fuera necesario, los trabajadores de AGR decidieron retirarse de la planta.
En un acto que se hizo en la puerta de la puerta de la planta, Pablo Viñas -referente de la comisión interna- señaló que esta pelea va a sostenerse. "Vamos a continuar peleando en defensa de nuestros puestos de trabajo" afirmó.
Además añadió que esta lucha sigue con un acampe en la puerta de AGR-Clarín. Los trabajadores informaron que, junto al acampe, también resolvieron en asamblea, "un mandato a la FGB y a la CGT reclamándole un paro activo nacional y un plan de lucha contra el ajuste y la represión".
Según señalaron en el acto, antes retirarse, demostraron que las máquinas y el stock se encontraban en sano estado.
FUERTE OPERATIVO POLICIAL
Cerca del mediodía, la Policía desplegó un fuerte operativo en las inmediaciones de la planta, que quedó rodeada por los efectivos de la fuerza que ahora responde a la Ciudad de Buenos Aires.
Según informaron los trabajadores, la medida se debía a una resolución que habría tomado el juez Pablo Casas, del juzgado contravencional N° 14. La toma de la planta se mantenía desde hacía casi 80 días.
